Trabajan marido y mujer, solo éste o sola aquella, son haitianos con pasaporte o acta de nacimiento que cruzaron con visa o en guagua desde Haití a República Dominicana. Simpáticos, hablan una suerte de cibaekreyol: “mwen vení a ganai cuaito”.

Sus sonrisas manifiestan que la República Dominicana ha actuado con humanidad.

Están en Sabaneta de Jarabacoa cosechando albahaca y otras hierbas. Todos se inscribieron en el Plan Nacional de Regularización. Andan con su carné. Chanel Julien “protege" el suyo dentro de un libro de salmos y proverbios.

Natalie Josef vino con su marido Risseau Auguste en el 2005. “En Haití hay poco trabajo. Veni a trabajai, a cuidar mi niño y pa llevai lo cuaito” a dos hijos que tiene en Haití y uno aquí en nuestro país. “Yo tá bien aquí, yo tá contente”.

Nuestro gobierno ha dado ejemplo exitoso al ordenar la presencia de extranjeros.

Risseau trabajó primero en la construcción, ahora está mojando con máquina, pero aspira a mucho más. Presta dinero a otros compatriotas; compra y revende saquitos de arroz, agua, galoncitos de aceite, leche, refrescos. Tiene varios sueños, entre ellos tener un vehículo y un negocio formal.

Adilia Nue ha parido tres muchachos en República Dominicana. "Ni un peso, dice, me cobraron en el hospital”.

Rostros convencidos de que con ellos se ha hecho lo que nunca se hizo.

Cuando Chanel cobra, paga la casa y lo que debe en el colmado. El resto, 500 o 1,000 pesos, lo envía a Haití para comprar "lo que sea, un chivo, una vaca, para que me lo guarden cuando me fui allá”. 

Para él, dominicanos y haitianos son hermanos, porque lo han ayudado y nunca le ha faltado el dinero.

Regularizados y sin temores  cobijan sus sueños de esperanza.

288,466 extranjeros que estaban sin papeles dominicanos se INSCRIBIERON en el Plan Nacional de REGULARIZACIÓN del gobierno dominicano. 

Unos lo hicieron con sus pasaportes, otros con actas de nacimiento o cédulas. 

Los haitianos cosechan albahaca y buenas relaciones con sus hermanos dominicanos.

Muchos no pudieron regularizarse y están retornando voluntariamente a Haití, con la ilusión de conseguir los papeles haitianos allá y regresar a buscar trabajo aquí.

55,000 personas NACIDAS en nuestro país, hijas de ambos padres en condición migratoria irregular, que portan o una vez portaron papeles dominicanos, a esas 55,000 personas les fue RATIFICADA su NACIONALIDAD dominicana con lo que podrán beneficiar a sus hijos.

En este país ellas han podido trabajar y ganar el sustento de su familia.

La REGULARIZACION de extranjeros y la RATIFICACIÓN de la nacionalidad dominicana a miles de personas en nuestro territorio NO HA CONCLUIDO, pero VA MUY BIEN. En estos momentos se completan expedientes, se depuran y se están entregando miles y miles de carnés.

República Dominicana, NUESTRO PAÍS, es un EJEMPLO EXITOSO para otros países de como puede ORDENARSE CON HUMANIDAD la presencia de extranjeros en condición migratoria irregular en su territorio.

Si quieres conocer más: Yo le gusta aquí má que Haití. Video / Fotos

Si tengo papele, soy libre. Video