Palabras de Bienvenida al Vicepresidente de Estados Unidos Joseph Biden

Señoras y señores,  

Me complace sinceramente dar la bienvenida al vicepresidente Joe Biden y su comitiva, en nombre del gobierno y el pueblo de la República Dominicana, así como en el mío propio. Quisiera, además, por vía de nuestro distinguido visitante, enviar un mensaje de amistad y solidaridad al Presidente, Barack Obama, y a todo el pueblo de los Estados Unidos. 

Tanto en su vida pública como privada, el Vicepresidente Biden es un ejemplo de tenacidad y fortaleza frente a las adversidades, cualidades que determinan el liderazgo que ejerce en su país y el mundo.  Su visita a estas tierras, cuna de la expansión del Mundo Occidental a las Américas, necesariamente viene a profundizar nuestras relaciones con Estados Unidos, fundamentadas en el respeto y la colaboración mutuas. 

En la reunión que acabamos de concluir, hemos pasado revista a la relación bilateral y tocado puntos de mutuo interés, entre los que destacan la seguridad en el área del Caribe y Centroamérica, la lucha contra el flagelo del narcotráfico, el tema de la energía y el comercio.  

La República Dominicana y los Estados Unidos trabajan mancomunadamente para garantizar la seguridad en el  área del Caribe y América Central. Los esfuerzos conjuntos son cruciales para el combate del narcotráfico, pero también del tráfico de personas y la contención de la inmigración ilegal. En este sentido, agradecemos su apoyo y acompañamiento, que ahora se manifiesta también a través de las iniciativas que impulsa Estados Unidos a favor de las iniciativas de seguridad regional del Sistema de Integración Centroamericana. 

Como ya saben, Estados Unidos es nuestro principal socio comercial, y desde la firma del tratado de libre comercio DR- CAFTA las exportaciones hacia ese mercado se han incrementado un 24%, pasando de 3 mil millones de dólares en el 2007 a 4 mil 200 millones el año pasado. El intercambio comercial entre los dos países sumó 12 mil millones en el 2012, y la República Dominicana ocupa el noveno lugar para las exportaciones norteamericanas en el Hemisferio Occidental. Somos conscientes, sin embargo, de que el DR- Cafta también encierra desafíos, fruto de las grandes asimetrías de nuestras economías. Confiamos en contar con la colaboración de Estados Unidos para que nuestros intercambios comerciales se realizen siempre en condiciones justas y sostenibles para nuestros productores.  

En este sentido, debo señalar nuestra satisfacción con la respuesta que dió el Presidente Obama a la carta que le enviamos en relación a los peligros que representa para la economía dominicana el Tratado del Comercio Transpacífico, conocido por las siglas TPP. Confiamos en que ciertamente los Estados Unidos tomarán en cuenta nuestra preocupación y que no competiremos en desventaja en el mercado norteamericano. 

Amigos y amigas,  Otro punto fundamental de nuestra agenda ha sido la seguridad energética, un tema de vital importancia para este gobierno, por su profunda repercusión en el presupuesto nacional y, por supuesto, en el desarrollo del país.  La República Dominicana ha iniciado una ambiciosa agenda de transformación en materia energética; un proyecto integral que debe llevarnos a superar para siempre el déficit energético.  Entre nuestros objetivos está la diversificación de la matriz energética, con énfasis en la utilización de energías renovables, estrategia en la que estamos recibiendo el apoyo técnico de Estados Unidos, que aprovecho para agradecer. Valoramos el interés de EEUU por apoyar nuestra autosuficiencia energética.

Como país con recursos limitados, debemos explorar las distintas fuentes de energía, para encontrar un equilibrio entre las energías limpias y los costos de generación.  En este sentido, conscientes de que EEUU muy pronto estará en condiciones de exportar gas natural, queremos reitrar nuestro deseo de ser incluidos como uno de los mercados prioritarios para la exportación de gas. Esto nos ayudaría a reducir notablemente los costos energéticos, uno de los objetivos estratégicos cruciales para la competitivad y el desarrollo en nuestro país. 

Amigos y amigas,  Quiero destacar, sin embargo, que más allá de las relaciones comerciales, a los Estados Unidos y a la República Dominicana los unen lazos profundos de hermandad y convivencia diaria para cientos de miles de familias. Más de un millón y medio de dominicanos y sus descendientes viven actualmente en Estados Unidos, aproximadamente la misma cantidad de turistas procedentes de los Estados que visitan nuestro país, además de los 250,000 residentes en él. 

Ese es un vínculo inquebrantable que pone a ambos gobiernos ante la responsabilidad compartida de crear las mejores condiciones para nuestros ciudadanos, dentro y fuera de nuestras fronteras.  

En este sentido, quiero hacer llegar nuevamente nuestro agradecimiento al pueblo de los Estados Unidos por el apoyo ofrecido para la puesta en marcha de  la que es ya una iniciativa sin precedentes en nuestro país para la protección de la ciudadanía; me refiero al Sistema de Atención a Emergencias y Seguridad, 911. Cuando se cumple su tercera semana de funcionamiento, ya podemos decir que está transformando para siempre la atención pública. Esos buenos resultados nos impulsan a trabajar con más entusiasmo en su expansión a otras zonas del país, proyecto en el cual esperamos seguir contando con el apoyo de Estados Unidos.   

Nuestras relaciones con los Estados Unidos son y seguirán siendo muy buenas. Nuestro propósito ha sido que reflejen la madurez de ambas democracias y se manifiesten como una alianza, con el propósito común de avanzar en el desarrollo de nuestros pueblos.  

Como en toda alianza, el respeto mutuo debe ser una regla inviolable, entendiendo que también entre socios existen a veces desacuerdos. Lo importante es saber  dirimirlos mediante el diálogo y desde el convencimiento de que la dignidad de un país trasciende la extensión de su territorio. 

Señoras y señores,  En resumen, nuestra conversación ha sido un diálogo franco, abierto y respetuoso, como debe ser entre dos amigos. A los Estados Unidos nos acercan la geografía, los valores democráticos y el amor por la libertad. Nuestro interés es que estas relaciones, hoy cálidas, lo sean aún más. Confío en que así será luego de esta visita histórica.  

Bienvenido una vez más, vicepresidente Biden, tiene usted un amigo más en este Presidente y en el pueblo dominicano.