Bellaca, mala, difícil, era la situación para los parceleros y pequeños ganaderos de Cumayasa, Los Llanos, San Pedro de Macorís.La sequía los zarandeaba de pobreza. Les mataba el ganado y las cosechas.Agua, agua, les hacía falta.Cuando llevaban sus vaquitas a beber a 4 o 5 kilómetros de distancia y bajaban con ellas de nuevo, tenían la misma sed, cuentan Juan Rojas y Jairo Alcántara. 

El presidente Danilo Medina visitó Los Llanos y los escuchó. Ordenó que se les construyeran 45 lagunas y la entrega de un tractor para romper la tierra.En Cumayasa, el campo recobra vida, dice Beny Hazim. "Cuando los pequeños productores se fortalecen, se estabiliza la economía y el país se independiza".Las vacas de Juan Rojas han vuelto a parir y a darle 50 galones de leche.Para aprovechar las lagunas han soltado truchas y tilapias, cuenta entusiasmado Miguel Romero. "Yo traje a mi papá y a mamá cargados para que vieran la laguna".Hoy compartimos la historia de gente trabajadora y empobrecida que sólo necesitaba agua para prosperar.Un video corto de excelente calidad cinematográfica y unas bellísimas fotografías.